domingo, 19 de febrero de 2012

1,2,3, Respira

     En nuestro quehacer diario no es raro vernos sobrecargados por nuestro, cada vez más frenético, ritmo de vida. Horarios ajustados, demasiadas actividades, caos circulatorio y otras tantas circunstancias que nos estresan. 
     Una manera de poder contrarrestar ese ritmo de vida es realizar ejercicios de relajación y de respiración. Una buena respiración conlleva una mejor oxigenación de todos los órganos, mejor circulación de la sangre, disminuye la tensión sanguínea, proporciona mayor rendimiento, facilita el sueño, con lo que a su vez mejora el descanso, disminuye situaciones de dolor, relaja en situaciones de estrés, etc. 
     Una de las técnicas de respiración, es la respiración contando, siendo una técnica bastante efectiva, además de sencilla y fácil de realizar. 
     La técnica de respiración contando, consiste en realizar la respiración inspirando contando de 1,2,3, a un ritmo tranquilo, notando como se llena de aire primeramente el estomago y seguidamente los pulmones, pero sin acelerarse y sin forzar la respiración, aproximadamente al ritmo de 1 segundo, 2 seg., 3 seg., mantener la respiración durante 2 seg. y efectuar la expiración nuevamente contanto 1, 2 y 3 al mismo ritmo que la inspiración.
     Esta técnica es conveniente practicarla en casa dos o tres veces al día, para que una vez tengamos un manejo adecuado poderla realizar en otras circunstancias de nuestro día a día y en cualquier momento. Durante la práctica intentaremos buscar un momento en el que nos encontremos tranquilos. Bien tumbados o sentados, con ropas olgadas, y con los ojos cerrados durante uno ó dos minutos, practicaremos la técnica de respiración. Una vez que controlemos la técnica en casa podremos trasladar la técnica a cualquier situación. Esta técnica como veís es rápida y sencilla de llevar a cabo. 


Autocontrol

    El autocontrol, es cualquier acto o cognicion que emitimos sobre nuestra propia conducta. Es controlar la posibilidad de eligir entre varias opciones, que puedan ser más beneficiosas para nosotros. Tener el control sobre nosotros mismos. Sin embargo en algunas ocasiones, no somos capaces de mantener el control sobre ciertas conductas o pensamientos, que pueden llegar a dominarnos, provocandonos situaciones de estrés o de ansiedad y en casos más severos provocarnos patologías como compras compulsivas, comer descontroladamente, discusiones de pareja, etc. 
     Estas conductas desadaptativas se realizan en su gran mayoría de forma automática sin que seamos conscientes de los mecánimos que intervienen y se desarrollan como forma de evitar alguna situación estresante o ansiosa. 
     La manera de poder ejercer el autocontrol sobre conductas o pensamientos perjudiciales, pasa primeramente por hacerlos conscientes. En el momento en que las hacemos conscientes y prestamos atención, podremos ver en que circunstancias nos ocurren y cual es el estado en el que nos encontramos. Desde el momento en el que hacemos conscientes nuestros actos y pensamientos, estaremos en condiciones de poder elegir entre varias alternativas de accion, de poder detectar, detener y ejercer control sobre las conductas perjudiciales y cambiarlas por otras conductas más adaptativas y beneficiosas para nuestra salud.